Espectáculos
Familia ensamblada: el Chino Leunis se mudó con su novia y los cuatro hijos de ella
En la noche del domingo 12 de julio, Leandro “Chino” Leunis volvió a la pantalla de Telefe para conducir Jesus, el adelanto, un anticipo semanal de la exitosa novela brasileña.
Además de nuevo ciclo televisivo, el conductor tiene nuevo hogar, ya que se mudó oficialmente a la casa de su novia Maca junto a los cuatro hijos de ella.
La cuarentena por la pandemia del Covid-19 hizo que el Chino pase más tiempo en la casa de su pareja, por lo que todos juntos, decidieron que se quedara, explicó en una entrevista a La Nación.
El conductor contó que su hija Delfina, pasa un tiempo con él y otro con su mamá, la locutora Karin Rodríguez, y que entre todos hay muy buena relación: “Somos una banda hermosa. Las cosas están saliendo súper bien y ellos se llevan bárbaro. Estamos aprendiendo muchísimo de cada uno de los integrantes de esta banda y me siento muy agradecido”.
El chino se refirió también a la buena onda que mantiene con Karin: “Tengo una relación excelente con mi exmujer, que también conoce a Maca y de vez en cuando se intercambian algunos mensajes por cuestiones de Delfi. Gracias a Dios, todo se acomodó muy bien. Cuando hacés las cosas bien, honestamente y con amor, todo se acomoda. Delfi está enorme, con sus momentos de rebeldía, de ajuste, de pedir límites y ahí vamos, coordinando bien con la mamá para estar alineados en lo que hacemos”.
Sobre cómo comenzó su amor con su pareja, el locutor confesó: “Conocía a Maca de antes; en su momento era una amiga y nunca imaginé que iba a transformarse en mi mujer. Maca es directora de una fundación de una escuela de coaching, que es donde certifiqué como coach. Es un poco workaholic, así que cada tanto tengo que pedirle que pare de trabajar. En la pandemia está trabajando el triple y yo también. Monté un estudio en casa con luces, equipamiento conexión más rápida a internet. Y además atendemos las cosas de la casa, las tareas de los chicos. Es una agenda apretada y cuando llega la noche, apoyamos la cabeza en la almohada y tardamos veinte segundos en dormirnos”.
