Flamengo Racing vuelta semifinal Copa CONMEBOL Libertadores

Cómo explicar que un partidazo puede terminar 0 a 0 y que una serie cargada de emociones puede tener solo un gol en 180 minutos, que encima fue en contra y de rebote. La ventaja de la ida le alcanzó a Flamengo para superar a Racing en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores y ahora los cariocas esperan rival en la final.

Agustín Rossi, el arquero argentino, fue el salvador del poderoso equipo brasilero, que pudo haberlo ganado en la primera parte y que estuvo al límite de perderlo en la segunda mitad. Las atajadas del ex Boca fueron claves para que Fla lograra la clasificación.

En el comienzo, el partido fue similar a lo que se vio en Río de Janeiro hace una semana. Flamengo dominaba y empujaba a Racing contra su arco. Araújo congeló los corazones de todos en Avellaneda con sus remates. Y el equipo se movía al ritmo de De Arrascaeta y Carrascal, con los desbordes picantes de Varela.

Pero los de Costas encontraron la forma de golpear a su rival. Rápido para el contrataque y fuerte para ganar de arriba, La Acadé tuvo oportunidades claras con los cabezazos de Conechny y Maravilla Martínez. El problema fue que bajo los tres palos se encontraba Rossi.

Claro que Cambeses también demostró que es arquero de equipo grande y mantuvo a Racing a salvo en los peores momentos con sus increíbles voladas. Puso el rostro para taparle un mano a mano a De Arrascaeta y también se vistió de asistidor, ya que con un pelotazo de 50 metros, dejó solo a Solari, que estuvo cerca de anotar.

El final del primer tiempo La Acadé logró salir del agobio y con sus centros logró complicar a la defensa carioca. El mega equipo, plagado de figuras sufría cada vez que la pelota volaba a su área.

Llegó el pitazo y los de Costas se fueron al descanso llenos de esperanza con lo que podría pasar en los segundos 45 minutos. A su vez, el inicio del complemento no pudo ser mejor. Marcos Rojo logró enloquecer a Gonzalo Plata, el ecuatoriano respondió de manera violenta y se fue expulsado.

Los papeles de lo que hasta allí había sido el partido del conjunto brasilero se quemaron completamente y desde ese momento los roles cambiaron por completo.

Ahora Racing era el que marcaba las condiciones y tenía todo para conseguir el gol de la igualdad y Flamengo se replegaba en su área. Los pases cortos, las gambetas y los tiros al arco fueron al bolsillo y el Fla sacó el repertorio defensivo: enfriar el partido, reventarla y festejar cada salvada.

Almendra sacó un gran tiro, que Rossi tapó como pudo y Felipe Luis, el entrenador del Fla, entendió que era el momento de meter mano a su banco de suplentes para rearmar la estrategia. Sacó a figuras importantes como Jorge Carrascal y Giorgian De Arrascaeta. Y un rato después también llamó a Araújo y Varela. En su lugar mandó a Ñíguez, Danilo, Emerson y Bruno Henrique a la cancha.

Ante el planteo defensivo del rival, Racing tomó impulso y fue con el cuchillo entre los dientes a buscar a su presa con más ganas que claridad en el juego.

Faltando 20 minutos casi se desmorona todo: Marcos Rojo fue a cabecear y chocó con un rival y se ganó una roja. Pero la tensión se alivió cuando el VAR llamó al árbitro Piero Maza para corregir la sanción. 

Entre faltas, reclamos, lesiones y mucha charla, el tiempo se le escapó a Racing. No llegó a sumar oportunidades demasiado claras y por eso Costas mandó a Balboa y Vietto a la cancha por Solari y Almendra. Ambos tuvieron oportunidades pero Danilo y Rossi taparon sus remates.

En el final Colombo cruzó un fierrazo que era un golazo, pero el tiro se fue apenas alto. Lo tuvo Vietto nuevamente, que se tomó un segundo en el área chica para definir pero otra vez chocó con Rossi.

El área de Flamengo era bombardeada, el ánimo en el Cilindro era enloquecedor y en la última jugada del partido fue Cambeses a buscar el centro. ¿Qué pasó? Nunca tiraron la pelota al área y la jugada se diluyó.

El pitazo final ahogó las ilusiones, los 6 minutos de descuento tuvieron gusto a poco, especialmente por el tiempo que se perdió con el VAR pero ya no había tiempo para reclamos. Flamengo se llevó la clasificación y Racing se fue con la cabeza en alto, habiendo peleado hasta el final contra uno de los clubes más fuertes del planeta.