Femicidio de Anahí Benítez: Marcos Bazán fue condenado a perpetua

Anahí Benítez tenía 16 años cuando el 4 de agosto de 2017 su cuerpo fue encontrado sin vida semienterrado en la reserva de Santa Catalina en Lomas de Zamora tras seis días de intensa búsqueda.

Este martes 6 de junio, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 de Lomas de Zamora sentenció a prisión perpetua a Marcos Bazán, el único acusado y considerado culpable del femicidio.

Bazán, es el dueño de la casa donde se cree que la adolescente fue retenida, drogada, abusada sexualmente y estrangulada. Recibió la pena máxima del Código Penal, al ser considerado coautor de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada, homicidio triplemente agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género”, y partícipe necesario de un “abuso sexual agravado por acceso carnal”.

Días atrás, cuando se conoció la sentencia condenatoria, la defensa de Bazán sostuvo que el hombre es inocente y que la causa estuvo armada desde el primer momento, ya que dijeron que no existen pruebas en su contra ni nada que lo vincule al otro imputado de la causa, Marcelo Villalba, cuyo ADN fue encontrado en rastros de semen en el cuerpo de la víctima y es el principal imputado por el femicidio.

Villalba dejó de ser juzgado en la segunda audiencia porque se concluyó que era un “psicótico” que no estaba en condiciones de estar en el juicio.

Durante el juicio, el fiscal de la causa, Hugo Carrión afirmó que Anahí fue “torturada y cosificada” y si bien Villalba–quien tiene una condena por un abuso en Capital Federal– no estaba siendo juzgado, se refirió a él como el autor de la violación y coautor del crimen, recordando que el celular de la víctima se halló en poder de uno de sus hijos.

Como prueba clave contra Bazán, Carrión mencionó el olfato del perro rastreador Bruno, que detectó el rastro odorífero de Anahí dentro de su casa y la presencia del propio imputado en la fosa donde se halló el cuerpo a 235 metros de su vivienda.

Otras pruebas son algunos objetos de Anahí que se encontraron en la casa de Bazán, como una tijera que la ella solía tener en un morral, una llave que solía colgarse en el cuello y que se comprobó que abría la puerta del domicilio del imputado, y una pala del acusado con tierra similar a la del sitio donde fue enterrado el cuerpo.

Sin embargo, diversas agrupaciones feministas y organizaciones de derechos humanos, así como amigos y familiares de Anahí, denuncian que la condena a Bazán es utilizada para cerrar una investigación que desde su inicio dejó serias dudas y exigen que la causa no se cierre y se reabra la investigación.

Silvia Pérez Vilor, madre de Anahí, días atrás dijo al medio local ADN Sur que está convencida de que hay más involucrados en el crimen de su hija: “El Tribunal comprendió y fue por unanimidad que Marcos Bazán es culpable. Pero es culpable de algo, no de todo. Acá hay más personas lamentablemente. Esperemos pronto tener a Villalba sentado, compensado para ser juzgado, y luego el resto muy pronto. Ya estamos en eso”.

El Centro de Estudiantes de la Escuela Normal Antonio Mentryut de Banfield, al que asistía Anahí, advirtió en un comunicado: "Seguimos con dudas ¿Quiénes mataron a Anahí? ¿Dónde estuvo los días que permaneció desaparecida? ¿Por qué hablan de justicia cuando Villalba no presencia el juicio porque su condición mental 'no lo permite'?".