"Manu, el rugbier", el nuevo jugador que pisa cada vez más fuerte: "La pelada va aflojando de a poquito"

Desde que el teléfono sonó y nominó a todos los participantes, y luego Santiago Del Moro les mencionó que deben “jugar” más y mostrarse ante las cámaras, se encendieron las alarmas en la casa de Gran Hermano porque cada uno de los jugadores quiere asegurarse su permanencia en el reality.

Ante estas circunstancias, con un tono de voz autoritario, y una postura segura e imponente, Emmanuel se animó a jugar con los estereotipos y sorprendió a sus compañeros con su faceta actoral y un alter ego llamado “Manu, el rugbier”. 

Con un estilo de voz que por momentos se asemeja a la de Ricardo Fort y con una personalidad que deja ver a un gigoló machista, “Manu, el rugbier” busca su lugar en la casa.

Aunque muchos participantes resaltan que la convivencia saca lo peor de cada uno, pasados los escándalos por los cigarrillos, Emma intentó reinventarse y hacer lo que más le gusta. 

“Ay, me duele la espalda de pararme así”, comentó el estilista a las cámaras sobre su alter ego para luego volver al personaje.

“Mira la reina que entra ahí… a mí me gusta todo”, declaró el cordobés cuando entró Virginia, y siguió acercándose a todos los jugadores y dejando su huella.

Zoe no quiso participar del juego de Emma y escapó diciendo “No bueno, basta”, aunque “Manu” no le hizo caso y le comentó: “Qué linda que estas Zoe hoy”.

Con su voz grave, “Manu” se encargó de revelar lo mucho que le gustan los “asados con los pibes” y “las previas con champagne y llenas de minas”, algo que dista mucho de la realidad de vida de Emmanuel, que tras zafar de la última gala de eliminación había avisado que se venían “cositas nuevas” de él en la casa de Gran Hermano.