"Él no quería verte feliz con nadie": el reclamo de los seres queridos de Camila Tarocco

Después de 10 días de una intensa búsqueda, el cuerpo de Camila Tarocco fue hallado en un descampado semienterrado a 20 cuadras de su casa y a 200 metros de la casa de Ariel Alberto González, su expareja, quien ya estaba detenido como principal sospechoso del femicidio y tenía antecedentes de violencia de género.

Camila tenía 26 años y la relación con el acusado, quien es el padre de sus dos hijos de 5 y 7 años, estaba atravesada por la violencia de género, por lo que existía una restricción de acercamiento vigente. Sin embargo, el viernes 3 de abril cenaron juntos y el sábado por la mañana, él la acompañó a tomar el colectivo, según declaró. Esa fue la última vez que la vieron con vida.

González le confesó a su familia el crimen, quienes guardaron el silencio hasta lo más que pudieron. Finalmente se quebraron y se comunicaron con la policía para delatarlo.

El asesinato de Camila Aldana Tarocco, confirma que al igual que el Covid-19, los femicidios también son una pandemia en Argentina. Según el Registro Nacional de Femicidios de MuMaLa, en los primeros 100 días del 2020, 96 mujeres murieron en manos de la violencia machista, provocando el compás de un femicidio cada 29 horas en Argentina. Además, desde que inició la cuarentena, se incrementó un 40% las denuncias por violencia de género.

Tras darse a conocer la triste noticia de que mataron a Camila, sus seres queridos se manifestaron en las redes sociales exigiendo justicia y apuntando hacia la constante violencia de González: “Me da bronca e impotencia que no tuviste derecho a elegir y un hijo de mil… lo hizo por vos. Y te arrancó la vida, no quería verte feliz con nadie, y él tampoco te quiso hacer feliz porque te golpeaba, te manipulaba como quiso. Hizo de vos lo que a él se le canto las pelotas".

"¿Cómo le decís a esas criaturas que su papá mató a su mamá? Tantas preguntas sin respuesta. Se me llenan los ojos de lágrimas con sólo pensar en el dolor de la familia, ¿qué más van a esperar para hacer algo? ¿Cuántas más tienen que matar? Dejen de matarlas", compartió otra amiga en una publicación junto con el reclamo de "En Moreno falta y faltará Camila".

González tenía antecedentes por amenazas, robo y violencia de género, pero eso no era impedimento para que circule por la calle sin pulsera ni tobillera electrónica. La familia de Camila apuntó contra el juez Gabriel Castro, quien le había otorgado la domiciliaria al acusado, sin asegurar el monitoreo policial correspondiente.