Katia expresó malestar ante los familiares y no se la dejaron pasar

Katia Fenocchio no discrimina en la casa de Gran Hermano, y así como se quejó mil veces de los jugadores por no dejarla dormir, atravesó una situación similar con los familiares y seres queridos que ingresaron.

Al despertar por la mañana del martes, la Tana no quería levantarse de la cama a pesar de los pedidos de Gisela, su prima, y explicó que se debía a “dolores en el cuerpo”.

Katia después se enojó al darse cuenta de que su prima “no le puede decir nada”, especialmente porque ella quiere saber si “están vivos sus gatos”. Cuando Selva Pérez le recomendó que comience a contarle cosas que vivió en el reality, la Tana contestó sin pulgas.

“¿Qué le voy a contar? ¿Que no puedo dormir? ¿Que me duele el o… por las hemorroides?”, sostuvo la oriunda de La Matanza.

Gisela le pidió a Katia que se levante de la cama y “piense en positivo”. La jugadora contestó que le dolía la garganta. Una vez que por fín salió de la habitación, fue aplaudida por todos los familiares, jugadores y seres queridos.

Sin embargo, Diva, hermana de Juan Pablo, señaló que “Katia está muy sola y no habla con nadie”. “Siempre fue así y la gente la deja”, contestó Devi.